Veamos ahora cómo Internet interacciona para satisfacer ese instinto de información. En primer lugar, hay que recordar que éste no fue el primer ni el más inmediato propósito con que se fundó la red, pero sí el que más la ha desarrollado. Podríamos hacer un recorrido sobre la historia de Internet, a partir de la primera página web publicada el 6 de agosto de 1991 (http://info.cern.ch; hoy día la página del Centro de Investigación Nuclear con partículas subatómicas de Ginebra es www.cern.ch). Pero me parece mejor ir directamente al asunto preguntándonos cuáles son las páginas más consultadas.

Supuestamente, deberían ser las que mejor satisfacen el instinto de “saber lo que pasa por el mundo”. Según la principal página evaluadora del tráfico en la web (www.alexa.com), las diez páginas con mejor ranking en el mundo son:

1. Yahoo! (www.yahoo.com). Portal en la web de este motor de búsqueda, ampliado con servicios de correo electrónico y opciones personalizables para obtener noticias, relacionarse con otros usuarios por medio de salas de tertulia, juegos online, clubs, utensilios de elaboración de páginas personales, etc.
2. Google (www.google.com). Originariamente otro motor de búsqueda de páginas, imágenes, vídeos, etc., en la web, con multitud de utensilios para los usuarios, como e-mail, traducción de texto, noticias, mapas, notificación mediante alertas, etc.
3. Microsoft Network (MSN, www.msn.com). Proveedor de Internet y su página de contenidos, del principal fabricante de software.
4. Baidu.com (www.baidu.com). Motor de búsqueda líder en el mercado chino.
5. Yahoo! Japón (www.yahoo.co.jp). Lo mismo, respecto a Japón.
6. Myspace (www.myspace.com). Página no comercial que permite a los miembros crear perfiles con los que comunicar con otras personas, almacenar y compartir vídeos, música, etc.
7. SINA (www.sina.com.cn). Proveedor de Internet y de información, con sede en Shangai.
8. EBay (www.ebay.com). Casa de subastas y venta directa online.
9. TENCENT (www.qq.com). Operador de Internet con sede en Shenzhen (China), proveedor de QQ, un sistema de mensajes instantáneos.
10. SOHU (www.sohu.com). Se presenta como el principal proveedor de servicios de Internet en China; cotiza en el NASDAQ.

En España, las diez páginas con más tráfico son (suprimiendo las repeticiones representadas por google.es, MSN, Yahoo!, google.com, Passport.net y MSN.es):

1. El Mundo (portal en Internet del diario del mismo nombre, elmundo.es)
2.  Blogger.com (servidor de páginas personales modificables automáticamente).
3. Passport.net (www.passport.net). Es una página de registro que automáticamente sirve para iniciar sesiones como usuario en varios portales web que ofrecen correo electrónico y otros servicios que exigen estar registrado.
4. Windows Live (Live.com). El nuevo buscador y proveedor de servicios de MSN.
5.  YouTube (portal de carga y descarga de vídeos para compartir con otras personas, youtube.com).
6.  Ebay España.
7.  Terra (terra.es, portal de acceso a Internet tanto gratuito como de pago). 
8.  MARCA Digital (web del diario deportivo, marca.com).
9.  El País Digital (portal del diario, elpais.es).
10.  Wikipedia (enciclopedia “libre” en la que cualquier internauta puede contribuir escribiendo, wikipedia.org).

En el plano internacional, los cinco primeros clasificados son “motores de búsqueda”. Cada vez más resulta un anacronismo definir a los dos principales —Yahoo! y Google— como tales, pero es cierto que su éxito deriva de que lo que originariamente fueron: índices de páginas de Internet, cuya calidad desbancó a los más famosos de los primeros años de Internet, como Altavista. Internet nació como una forma de compartir información, pero en cuanto comenzó a extenderse, requirió de índices de referencia donde poder buscar páginas sobre los temas que interesaban al público. Por mucho que, desde el punto de vista informático, Internet sea una red jerarquizada, desde el punto de vista de la información contenida en las páginas, es un sistema desorganizado… O más bien que tiende a organizarse por criterios desconocidos en un mundo donde la información seguía cauces más rígidos: la red no se ordena en función de los objetivos y criterios de quienes la crearon, sino de quienes la usan. Y, cuando tal orden ha madurado, podemos hablar de la Web 2.0.

Internet es un sistema democrático y hasta populista porque, aparentemente, no hay más forma de saber si una página merece la pena para quien busca información que… saber que ya ha sido visitada previamente por otros internautas. El micropoder de cada uno decide quien tiene éxito y quien no en la red, con todo lo que triunfar en el ciberespacio conlleva hoy. La jerarquización de la importancia de las páginas —merecen ser vistas porque de hecho están siendo vistas— y el control de ciertos criterios de honradez que permiten distinguir la publicidad y el puro intento de atraer visitantes (repetición de palabras buscadas pero que no tienen que ver con el tema de la página, en ocasiones escritas en el código HTML pero no visibles en pantalla; redirección desde este tipo de páginas publicitarias a otras más formales; etc.) justificaron el triunfo casi absoluto de Google sobre otros buscadores que analizaron con menos rigor por qué unas páginas son más visitadas que otras.

Los grandes proveedores de servicios de Internet —que no acertaron tan rápidamente como Google en la indexación y presentación de las páginas que realmente interesan— reaccionaron, y ahí está Yahoo! —que aparentemente se había centrado en la prestación de servicios de correo, noticias y ocio— en el primer lugar de la clasificación.

La información no lo es todo, por supuesto no lo es en Yahoo!, pero sobre todo en portales-proveedores de servicios como Myspace y Passport.net, que se sitúan en puestos líderes sin ofrecer absolutamente ninguna información sobre “lo que pasa en el mundo”, sino ofreciendo a los particulares la posibilidad de intercambiar documentos (películas, fotos) con sus conocidos. Es como si Internet hubiera dado la vuelta y, tras un período de caos donde la gente no sabía con qué podía toparse en la red, cada uno se ha hecho su hueco y su grupo de conocidos cibernéticos en función de sus gustos, vínculos familiares, profesionales o del tipo que sea, y la red volviera a cerrarse concentrando el tráfico en grupos más pequeños que se relacionan sin necesidad de pasar por la “plaza mayor” representada por los tradicionales buscadores y los sitios de noticias.

La realidad de que Internet cada vez presta más servicios que informaciones está clara en el caso de eBay y de lugares de venta que no llegan a estar entre los líderes, pero que son también importantes, como Amazon.com para los libros. El propio eBay, como veremos, se especializa, y deja de ser un mercadillo de segunda mano para convertirse en una auténtica tienda con más garantías, en su nueva versión express. Google (que tiene el 49% del mercado de búsqueda en Estados Unidos) es consciente de todo ello y comienza a ofrecer servicios más allá de unos inocentes mapas, preparándose para ser también un auténtico portal de ventas. Eso sí, se encontrará con una fuerte —y unida— resistencia de eBay, Amazon y MSN (que en el mercado de búsquedas va en Estados Unidos bastante detrás de Google, con un 11%, de todos modos no despreciable).

Un vistazo a los líderes de Internet en España —aparte lo dicho sobre la importancia aún grande o que quizá lo sea siempre— de los portales informativos (o incluso estrictamente de determinados periódicos) a nivel nacional-local, deja al descubierto que, de todas formas, el usuario busca también aquí la comunicación interpersonal o la creación de círculos de opiniones o gustos compartidos. Esta realidad queda clara con el segundo puesto en el ranking de Blogger.com. La gente dedica cada vez más tiempo a leer y comentar lo que dicen sus conocidos, y a exponer al mundo sus propios comentarios, y menos a leer lo que dicen personajes extraños por distantes, aunque digan estar muy cualificados: la red se adapta a la psicología humana, que no es capaz de tener un infinito círculo de conocidos, ni de creer a personas de las que no sabe nada. Aunque El Mundo lidere la clasificación, es difícil saber si para la gente es más importante “saber lo que se dice” (aunque esté cerca de “lo que realmente pasa por el mundo”) que “saber lo que le interesa”, o saber de las personas y asuntos por los que se interesa. El mercado va sedimentando, probablemente, cada vez más en función de estos últimos criterios.

Acerca de eBay en España vale lo dicho para el caso internacional, y el caso de YouTube se asemeja al de Myspace. El de Wikipedia es notable por resaltar —a pesar de no ser una iniciativa española— dos puntos clave de Internet: el libre acceso a la información y la promoción de la iniciativa privada en el ámbito cultural. En el caso de Passport.net el servicio que se presta es muy sencillo: ser el cajetín de las llaves por el que uno pasa antes de abrir el piso o habitación al que se dirige. Nada más.

Lo que no resulta difícil observar es que Internet no es otra cosa que gente organizándose de manera aparentemente anárquica, pero creando nodos, intercambiando visiones del mundo, comprado o vendido productos, servicios o ideas, acudiendo a grandes colmenas para satisfacer su instinto de información, votando al que será el personaje del año para le revista Time, buscando un Rolex antiguo en e-Bay por 10 dólares, o compartiendo solo con unas docenas de amigos en un pequeño blog el diario de bitácora personal, en el que se relatan desde chismorreos sin interés a la visión que se tiene del conflicto judeo-palestino, tan desgraciadamente actual en estos días. Todo eso realizado de forma masiva por centenares de millones de personas en todo el planeta esta produciendo su transformación. Su forma de gobierno, su organización ya no pueden ser las mismas, porque un decidido grupo de personas, integrado por todos los que se apoyan en el mundo de las comunicaciones electrónicas, utilizando o no Internet, está realizando operaciones y recobrando a paso de hormiga y de forma silenciosa y buena parte inconsciente, parcelas de influencia. Emerge, sigiloso e imparable, el micropoder, el poder de la gente corriente, el poder de cada uno. Pero no es oro todo lo que reluce.

De acuerdo