Estimado Embajador de Austria e anfitrión, querido Christian.
Estimado Ministro y querido amigo, Josep Piqué.
Estimado Presidente de la Academia de la Diplomacia del reino de España, Santiago Velo de Antelo, Excelencias, Sras. y Sres.
Queridos amigos y amigas. Y permítanme un saludo especial a mi marido Francisco, aquí presente; Hoy Ustedes han acudido aquí a la Embajada de Austria para celebrar conmigo mi Ingreso en la Academia de la Diplomacia del Reino de España.
Ante todo quisiera expresa, al Sr. Presidente dela Academia y a su Comité Director, mi gratitud por haberme ofrecido el ingreso en la Academia de la Diplomacia y quiero darle las gracias en particular al Sr. Ignacio Buqueras y Bach por haberme propuesto como candidata. Es un honor para mí y acepto encantada ser miembro de esta institución tan prestigiosa.
Los que me conocen saben que, como diplomática austriaca de carrera y luego política de Asuntos Exteriores y hoy en día socia en el gabinete de abogados Cremades & Calvo-Sotelo, sigo la política exterior europea muy de cerca e intento contribuir desde un punto de vista positivo, en este mundo difícil y cambiante.
Aunque me interesa toda la política exterior global-creo que es así con todos los ministros de exteriores (no, Josep presentaste tu nuevo libro muy recientemente “El mundo que nos viene!”) me he centrado, en los 8 años desde que dejé la Comisión Europea como Comisaria de Relaciones Exteriores y Política de Vecindad, en particular en América Latina, Asía Central y algo en los Países del Sur del Mediterráneo, primero, en la Fundación Eu-Lac (European Unión-latín América and Caribbean Countries) y casi al mismo tiempo en la Fundación Euroamérica, Fundación europea con sede en Madrid dirigida a fomentar lazos entre la UE y América Latina.
Como Presidenta del Consejo Asesor del Eurasian Council of Foreign Affairs” y como Presidenta del Senado de la Economía, Europa, Capitulo Español, “me importa mucho” el futuro de Europa. Además me he comprometido a ayudar y a promocionar la Formación Profesional dual en la Fundación Bertelsmann y me ilusiona contribuir con otras Fundaciones como la de Princesa de Girona y antes la de Novia Salcedo, siempre con el fin de ayudar a los jóvenes para que tengan un futuro profesional mejor. El hilo conductor entre mis diferentes actividades, ha sido y sigue siendo la relación entre los seres humanos, y a través de ellos con asociaciones, empresas, fundaciones e incluso entre países con el fin de mejorar nuestra convivencia.
Excelencias, Amigos, Señoras y Señores,
Como he dicho también en mi libro recientemente publicado (“Benita: Donde hay voluntad, hay camino”) de momento en Alemán y espero que el año próximo podamos tenerlo en español: hoy vivimos un cambio de época geo-político en un nuevo mundo globalizado, con nuevas tecnologías: nos vemos inmersos en un proceso de intensas transformaciones en Europa y en el Mundo.
Por eso, permítanme que hoy mencione Europa como primer tema. Sabemos que el proyecto Europeo que nos ha traído una paz nunca vista, prosperidad, democracia, un Estado de Derecho, respeto de Derechos Humanos y una economía de mercado, está en cuestión.
Después de haber vivido y superado las grandes crisis en la UE, la crisis financiera, de confianza en la política, actualmente, también tenemos que hacer frente a los grandes retos de nuestros tiempos. El Brexit, la cuestión de las migraciones hacía Europa, la seguridad y la defensa, la lucha contra el terrorismo, el cambio climático, la demografía decreciente en Europa y la explosión de la población en África en las próximas décadas, la revolución digital y la falta de gobernanza en la Economía Mundial.
Es mi convicción que Europa tiene que reposicionarse en este nuevo mundo multipolar en el que hay nuevos centros de poder que compiten con nosotros y EEUU, como China, India, Rusia, Brasil Turquía e Irán (Arabia Saudí, Nigeria etc..) y nuestra Alianza Trasatlántica ya no es la misma.
¡No vivimos solamente un cambio de Paradigma, sino un cambio de Época!
En este nuevo orden global, Europa tendrá que estar mucho más unida y más fuerte, para ser un verdadero actor político!
A este escenario se una la gran revolución tecnológica y de la digitalización que crean nuevas condiciones de vida y de trabajo. Además, en los últimos años hemos tenido que enfrentarnos a un territorio sin precedentes, al DAESH (o ISIS), hoy algo mitigado, pero que no ha desaparecido. Movimientos de populismo y de nacionalismo, en parte surgidos por los años de crisis, el paro, una pérdida de contrato social, una desigualdad creciente, y en parte por una revolución anti-establishment” y por miedo a tener que enfrentarse a estos cambios arriba descritos y a perder la identidad, en particular después de los grandes flujos de refugiados y de la migración masiva, en los dos últimos años socavan nuestras democracia.
(Ningún país, por grande que sea, tiene hoy la fuerza, ni los recursos suficientes para enfrentarse a estas amenazas o retos solo, ni tampoco puede aprovechar solo las oportunidades que se ofrecen).
Pero el potencial de la Unión Europea, con quinientos millones de ciudadanos, no tiene comparación: somos todavía el primer socio comercial y el primer inversor extranjero casi en cada país del mundo y si pensamos en la economía, pertenecemos al G3. Además invertimos juntos en la Unión Europea más en la cooperación al desarrollo internacional que el resto del mundo.
Pero también es evidente que en la UE no estamos utilizando plenamente este potencial. La UE siempre se ha enorgullecido de su “poder no coactivo” porque en este terreno somos los mejores pero ahora los Estados miembros se han dado cuenta que solo el poder civil no hace justicia a una realidad en plena evolución. Y ha empezado a desarrollar unas capacidades militares y de antiterrorismo. Para Europa hoy el poder no coactivo y el poder coactivo van de la mano.
Personalmente he sido siempre defensora de un Estado Federal – “Las Naciones Unidades de la Unión Europea”. Y todavía lo sigo siendo aunque sé que en estos momentos no es posible. La UE tiene que hacer progresos. No todos los Estados miembros estarán de acuerdo, por tanto necesitaríamos una Europa más flexible que podría llamarse UE en “círculos concéntricos” o en forma de una ”geometría variable” o de “dos” o “varias velocidades”.
Esta posibilidad existe ya en el Tratado de Lisboa para un grupo de al menos 9 Estados Miembros que pueden avanzar si los Estados miembros que se quedan atrás puedan también ir adelante siempre que estén capacitados y muestren su voluntad.
Estoy en principio de acuerdo con las propuestas del Presidente de la Comisión Jean Claude Juncker sobre los avances necesarios en completar la UE Económica y Monetaria, la UE fiscal y bancaria, pero también de las otras Uniones que el menciona como por ejemplo la Unión Energética o la Unión Social, una Unión de Defensa y de Seguridad y allí con los primeros pasos en esta dirección por la Alta representante Mogherini con la nueva Cooperación Estructurada Permanente (CEP)!
Sras. y Sres.;
Desde hace tiempo estoy defendiendo la necesidad de votar con mayoría cualificada, en vez de pura unanimidad, hasta en cuestiones de Política exterior y de Seguridad, algo que antes era una cuestión “Tabú” y ahora empieza ser algo que Juncker también menciona.
A parte de esto, para hacer más eficaz la gestión y toma de decisión, creo que hay que reducir la Comisión Europea (de 28 y pronto 27 Comisarios). Podría imaginarme una Comisión donde hay un Comisario para los grandes países: Alemania, Francia, Italia, España y Polonia mientras que los otros podrían rotar cada dos años y medio o cada 5 años, como en el Consejo de Seguridad.
Me parecería otro paso adelante si solamente hubiera un único Presidente en la Comisión y el Consejo, algo que Juncker también menciona y que es posible según el último tratado de Lisboa.
El Presidente Francés Emmanuel Macron, en su discurso en la Sorbona, del 26 de septiembre de 2017, ha predicado también la necesidad de una Europa más fuerte y ha propuesto una Unión de defensa y seguridad, un Oficio Europeo de Asilo, una Agencia Europea de Innovación y un presupuesto para la Eurozona, ideas interesantes y en mi opinión necesarias. Sin embargo, dudo que estas reformas imprescindibles se hagan rápidamente.
Pues desgraciadamente, los Estados miembros no están en su mejor momento: Alemania y la Sra. Merkel, con la nueva Gran Coalición, con ciertos límites, Francia y el Presidente Macron, que se encuentra con una fuerte oposición a todas las reformas, Italia con un “gobierno técnico”, España que actualmente tiene muchos retos e incluso países como Hungría y Polonia que se han vuelto bastante Nacionalistas.
Excelencias, Sras. Y Sres.
Como segundo tema que ha ocupado toda mi vida profesional quisiera mencionar América Latina o Iberoamérica” para ustedes:
Pocas zonas del mundo tienen, con algunas tristes excepciones, como Venezuela en este momento, una afinidad tan alta en valores e intereses como las que unen a la Unión Europea, y en particular España y Portugal, con América Latina, la democracia pluralista y representativa, el respeto de los derechos humanos y las libertades fundamentales, la libertad de expresión, El Estado de Derecho y el respeto a las reglas de juego. Entre Europa y América Latina tenemos una historia común, con una visión del mundo muy parecida en los que se refiere a principios.
En este mundo globalizado tenemos que crear las condiciones para una sociedad más justa, inclusiva y más sostenible social y ambientalmente. El mundo está cada vez más interconectado y el tipo de relación entre los países está cambiando. La globalización digital, supone una gran transferencia de datos y esto pone de manifiesto la transformación que están viviendo las sociedades, también en América Latina.
Está claro para mí que la UE y América Latina deben profundizar más sus lazos ante el Brexit y el auge del proteccionismo en EEUU, y aquí es particularmente España en el seno de la UE la que tiene que jugar un papel de País promotor y de empujar la renovación de su estrategia de cooperación. Creo que actualmente se pueden crear las condiciones para que pueda materializarse un considerable avance de esta relación.
En América Latina, los bajos precios de las “commodities”, evidencian la necesidad de potenciar la diversificación de las exportaciones y de mejorar la productividad, lo que implica una mayor atención a la educación, a la tecnología, a la innovación y a la digitalización de sus economías. Para ello cuentan con una población joven, con una alta concentración urbana y gran capacidad de emprendimiento y una amplia inserción en el escenario global.
Cada vez es mayor la inserción Latino-americana en los Países de la UE. Comenzando por las llamadas multilatinas. A su vez, los empresarios europeos buscan un entorno amigable y con seguridad jurídica para los negocios.
Por supuesto, un objetivo prioritario es finalizar las negociaciones entre la UE y Mercosur y actualizar los acuerdos entre Europa y México así que entre la Eu y Chile y además sería deseable conseguir la convergencia entre el Mercosur y la Alianza del Pacifico.
Además, una estrategia UE-Al posmoderna será fundamental en las cuestiones de buena gobernanza, y un pacto para la productividad, los dos puntos donde AL tiene que mejorar todavía.
Al mismo tiempo tendría que ser una estrategia menos Eurocéntrica y menos patrocinalista. Una relación moderna y profunda de igual a igual. A parte de esta relación natural entre la UE y AL que siempre evoco, es importante, pues tenemos que ser conscientes que China ya ha sustituido la posición de EEUU en AL excepto en México. Primero en la adquisición de materia prima, después en infraestructura y también en la financiación de grandes proyectos. Además China ha ofrecido a los Países de AL integrarse en su gran proyecto “one belt, one road” a través de infraestructura s, comercio e cultura. Creo que es importante que la UE acepte esta evolución de buen grado y busque una cooperación “win-win”, donde es útil y conveniente para ella, por ejemplo una triangulación Europa / AL-China.
En la Fundación Euroamerica, donde soy Presidenta desde el año 2011, uno de nuestros objetivos es el de estimular la cooperación y el entendimiento entre instituciones, empresas y personalidades europeas e iberoamericanas para fomentar, desde el sector principalmente privado, las relaciones entre Europa y América y potenciar las excelentes oportunidades que se pueden dar en los dos sentidos.
Para terminar: Excelencias, Sras. y Sres.; queridos colegas. Quisiera hacer hincapié en un tercer tema, muy importante, sobre el continente africano. El club de Roma y el Senado de la Economía han desarrollado el “Plan Marshall con África” en el cual conciben un proyecto para hacer próspero ese continente. Ante un crecimiento de la población mundial y especialmente en África, la población allí se ha multiplicado por seis veces, hasta mil millones de personas y se duplicará todavía más hasta el año 2050. Europa y en particular España tienen que tener en cuenta, dada su cercanía, que estos Miles de Millones de personas puedan quedarse en sus países y eso lo harán solo si tienen la esperanza y futuro en una vida prospera.
A través de un Fondo Fiduciario Europeo que tendría que apalancar grandes montos privados destinados a crear energía renovable (fotovoltaica y eólica) en África como inicio de un gran desarrollo- con agua desalinizada- Crear “humus” y así agricultura, bosques, infraestructuras, pequeñas y medianas empresas, etc.. se tendría que dirigir esta gran proyecto de inversiones: “from billions to trillons”. Tendremos que invertir para llevar prosperidad a África y mantener Europa intacta!
Ahora no es el momento de ir a los detalles de este programa. Pero me parece fundamental que España tenga que dirigir su atención y su mirada futura también hacía África.
Gracias
Benita FERRERO-WALDNER: Socia de Cremades & Calvo-Sotelo; Ex Comisaria Europea de Relaciones Exteriores y Política de Vecindad, y de Comercio
